Nutrición Depurativa
Nuestro organismo tiene una serie de mecanismos para el mantenimiento de su estado, también para el mantenimiento del peso corporal. Al conjunto de estos procesos se llama homeostasis. Para romper la homeostasis y lograr perder peso es necesario que nuestro balance energético sea negativo, es decir que las calorías que ingerimos sean menores que el gasto calórico. Esto se consigue con dos líneas de actuación que van de la mano: disminuyendo las calorías que ingerimos en las comidas y aumentando el gasto calórico con la práctica de ejercicio físico. Estas dos líneas de actuación siempre adaptadas a nuestras circunstancias personales.
Es importante conocer las funciones de los macronutrientes que condicionan por tanto la cantidad que debemos ingerir de cada uno de ellos:
- Hidratos de carbono: función principal como sustrato energético. El 55-60% del total de las calorías ingeridas deben aportarlas este macronutriente.
- Proteínas: función principal estructural. El 10-15%% del total de calorías ingeridas deben aportarlas este macronutriente.
- Grasas: función principal composición de estructuras y material de reserva que garantiza supervivencia. El 20-30% del total de las calorías ingeridas deben aportarlas este macronutriente.
Por lo tanto es importante para perder el peso mantener los porcentajes de macronutrientes practicando una dieta hipocalórica moderada donde la pérdida de peso sea gradual asegurándonos del aporte de micronutrientes indispensables para la salud y garantizando una pérdida de peso definitiva.
Por lo tanto en el marco de una dieta hipocalórica moderada es importante tener en cuenta que:
- La dieta debe estar personalizada a las circunstancias de la persona, monitorizadas y corregidas en el tiempo si hiciera falta para mantener el balance energético negativo.
- Contenido correcto de micronutrientes (vitaminas y minerales) que nos garantice la ausencia de deficiencias nutricionales.
- Hidratos de carbono complejos, es decir, frutas, verduras, cereales integrales y legumbres evitando las harinas refinadas.
- Proteínas bajas en grasas: pescados, carnes magras…
- Grasas insaturadas: aceite de oliva, nueces, salmón…
- Cocinado a la plancha, vapor, horno evitando fritos y guisos.
- Comer despacio masticando bien.
- Uso de especias y hierbas aromáticas que aumentan la saciedad y la termogénesis.
- Aumentar el consumo de verduras y té ricos en flavonoides que tienen acción quema grasas.
Es importante aumentar en nuestra dieta depurativa el consumo de:
- Verduras de hoja verde, ricas en clorofila con gran acción detoxificante.
- Alcachofa: tonificante, diurético, ayuda en la digestión de las grasas, combate estreñimiento.
- Té verde: quema grasas
- Brócoli: antioxidante, depurativo, estimulante del sistema inmune, etc.
- Aumentar el consumo de fibra y agua.